Ayer fue un día intenso para mi...
Conversaciones con distintas personas me ayudaron a conocerme un poco más...
Me pregunto a veces si las personas que me rodean me conocen mejor que yo misma...más bien esto ha dejado de ser una pregunta para convertirse en una certeza.
Mi sueño de ser una mujer misteriosa se ha venido abajo estrepitosamente. Debo reconocer, y reconozco, completamente derrotada, que soy transparente. Como el cristal. Un cristal recién lavado....y transparente.
Digo yo que todo el mundo no va a ser tan listo, y si todo el que me conoce un poco me conoce bien es que soy transparente.
Pero no para mí. Creo que para la única persona que soy opaca es para mi misma...o tal vez es que no quiera conocerme, que no me guste lo que vislumbro...
Tengo otro montón de adjetivos para mi colección...
Atolondrada, crédula, ingenua, inconsciente, impulsiva... hay mas, que no recuerdo...
Mis adjetivos los guardo en una cajita y los saco de vez en cuando para saber si siguen ahí o si alguno se ha evaporado por arte de magia… Pero que va...hasta ahora ninguno ha desaparecido, al contrario, la caja cada vez esta mas llena, aunque no todos son negativos, que va...
Sin embargo, en mi horizonte atisbo un apunte de evolución...tenue...pero esta.
Una vez me contaron la historia de una chica que dedico su vida a cuidar de sus padres hasta su muerte. Continuamente soñaba con la libertad que tendría y disfrutaría el día que estos faltaran.
Primero murió su madre...al tiempo, su padre...al funeral de su padre llego una tía suya, mayor, que se cayó por la escalera y se fracturo varios huesos...diversas operaciones y años de rehabilitación hicieron que esta chica pospusiera todo lo soñado...debía cuidar de su tía ya que no tenía a nadie en el mundo.
Finalmente, la tía murió, dejándola heredera de todos sus bienes...
Quiso hacer su sueño realidad embarcándose en un viaje alrededor del mundo...quería visitar a todos sus amigos esparcidos por ahí...
En la primera escala del viaje fue a visitar a una antigua amiga de su madre con la que tuvo mucha relación en su niñez y a la que quería profundamente.
La encontró postrada en una cama, convaleciente de una grave enfermedad...
Anulo su viaje y se quedó.
Esto no tiene nada que ver con lo que yo estaba diciendo. Es un paréntesis, lo he recordado de pronto y hala, lo suelto, por si tiene moraleja.
Hablaba sobre un cierto atisbo de evolución....del cual me enorgullezco a la par que me hace sentir culpable. He de decir que cada vez menos, eso es verdad, de ahí el atisbo, pero creo que este sentimiento mio de culpabilidad por todo es atávico...y patético.
Alguien me dijo hace un par de días que no estuviera siempre pidiendo disculpas y dando las gracias... gracias, lo apuntare para tenerlo en cuenta.
Suelto frases sin sentido, frases hechas a veces, pero que para el avispado oyente tienen mucho significado... pongamos un ejemplo:
-Es que no se me puede dejar suelta....
Cada uno que saque sus propias conclusiones. Lo que soltó el avispado oyente me lo guardo.
Lo cierto es que estoy rodeada de personas que me ayudan en los malos momentos, que últimamente son bastantes, todo hay que decirlo. No pueden ser más dispares unos de otros, algunos no se conocen entre si, pero cuando lo hacen se caen bien... tienen una cosa en común, casi todos. Ponerme verde. Con todo el cariño del mundo eso sí, pero verde. Me quieren.
La persona más tranquila y pacífica del mundo tuvo deseos de matar en una ocasión. Por mi.
Miro a mi alrededor y les veo a todos, a los cercanos y a los lejanos y a veces no entiendo lo que ven en mi para quererme, para estar a mi lado sin condiciones...
Y he aquí el atisbo de evolución
¿Por qué están siempre ahí? ¿Por qué me quieren?
Tachan tachannnnnnnnnnnnnnn.....
Porque yo lo valgo
