domingo, 10 de agosto de 2008

PAPA 2ª PARTE


" En primer lugar, gracias a todos por su asistencia. Me van a perdonar la chuleta, pero es que así sabré cuando callarme.
Anoche, aquí mismo, escuché algo muy bonito sobre mi padre, nada de lo bueno que es, que es lo que se suele decir cuando alguien se va, sino algo que delata la huella que mi padre deja entre sus amigos.
Anoche, su amigo Antonio Alarcón dijo a Manolo: nos hemos quedado huerfanos.
Yo no se si algún día me acostumbraré a hablar de él en pasado. Pensaba que era inmortal, aunque él lleva tiempo preparando a su familia para este momento.
Ha tenido una vida larga y dura, pero feliz porque lo que más le importaba era su familia y sus amigos, y estos siempre han estado con él.
Es un hombre muy querido, no solo por su familia, que siempre te quiere, sino por las personas que han pasado por su vida, los de siempre y los de los últimos treinta años.
Todos los que están aquí le conocen, saben de su calidad humana, su respeto y tolerancia hacia los demás, su honradez y su inteligencia desarrollada a lo largo de su vida por los acontecimientos que le han tocado vivir.
Tiene una mente prodigiosa, que ha conservado hasta el último momento, tiene la virtud de dejar boquiabierto a todo el que le escucha, no es el típico abuelo que cuenta sus batallitas. Es un personaje y el tipo más interesante que he conocido en mi vida.
Yo voy a echar mucho de menos nuestras discusiones, porque es muy cabezón, nuestros debates sobre política, porque me encanta chincharle.
Cuando yo atacaba, él defendía como una fiera y con unos argumentos casi irrebatibles, pero yo, que soy tan cabeezona como él, siempre encontraba un resquicio por donde colarme para seguir pinchando. Tiene una fe inquebrantable en su gente y en la naturaleza humana.
En un libro de Almudena Grandes encontré la definición de una persona que se adapta a él perfectamente.
Mi padre es José Ginés Dominguez, defensor de la democracia, superviviente de uno de los episodios más cruentos y olvidados de la guerra civil como fué el éxodo de la carretera Málaga-Almería, sargento del ejercito popular de la Republica, combatiente antifascista, rojo y español."
Esta ha sido mi despedida. Ayer, 8 de agosto de 2008, día del veinte cumpleaños de su nieto, a las diez y media de la mañana, fué incinerado tras una ceremonia civil que oficiaron su hija y su hijo sentimentalmente adoptivo Manuel Pomares en el cementerio internacional de Benalmádena.

1 comentario:

M.A dijo...

Hola, yo también soy de Benalmádena yno sé cómo he llegado a tu blog. He leído lo de la carretera Málaga-Almería y quería comentarte que Jesús Majada, profesor del IES Arroyo de la Miel, está preparando una exposición para Centro de Exposiciones de la costa.
Mi más sentido pésame para tu entrada. Vaya circunstancias en las que me encuentro contigo.
Un abrazo y ya volveré por aquí